jueves, 25 de diciembre de 2014

ESPECIAL: Volviendo a la Canción de Navidad

Hoy 25 de diciembre quería hacer un pequeño homenaje a uno de los escritores más famosos del siglo XIX, recordando y a la vez ensalzando las enseñanzas que trae implícita una de sus obras más famosas. Canción de Navidad de Charles Dickens.

Dickens, el novelista de los pobres, el retratista de esa Inglaterra victoriana que se transforma, que cambia, muchas veces con consecuencias desastrosas para la clase proletaria que nace con la Revolución Industrial.
 
Retrato de Charles Dickens
Dickens no necesitó morir para hacerse famoso, sus novelas ya eran leídas por todas partes cuando él vivía. Novelas cargadas de amargas críticas, ironizadas a través de historias cruentas donde mostraba que los orfanatos y casas de caridad habían sido creadas por la más falsa filantropía del recién nacido capitalismo que, a pasos agigantados destruía toda la sociedad bajo su máxima de libertad económica.

Los ricos se hacían más ricos y los pobres crecían en número y empobrecían cada día más. Dickens fue un burgués entregado a las clases más bajas, no solo su pluma trabajaba contra las desdichas de todo el proletariado. Dirigió casas-reformatorios, fundó la revista Household Words para criticar las políticas que el gobierno proponía de “sermón y jabón” dirigido al proletariado, visitó las escuelas de Yorkshire para niños ilegítimos.  

Escribía y escribía, sin cansarse nunca, creando obras de arte que iban más allá de la propia literatura, que transcendían y mostraban la cara que el capitalismo y el burgués querían ocultar a la sociedad romántica del XIX. Daba a conocer las caras ennegrecidas de los niños trabajadores, las exhaustas jornadas de más de quince horas, la injusticia de que unos se hicieran tan ricos a costa del empobrecimiento de otros, fustigó la corrupción que ya acompañaba a la sociedad. Se daba en cuerpo y alma en las lecturas públicas de sus novelas.

Y así el 9 de junio de 1870 dejando inconclusa su última novela, El misterio de Edwin Drood, moría tras haber sufrido un derrame cerebral.

Canción de Navidad es sin duda una fábula moral para una época y una sociedad determinada que no queda muy lejos de la realidad que nos rodea ahora.

Creo que no es necesario hacer un pequeño preámbulo de este cuento si comenzamos con una de las partes que más me impactaron a mí:
 
Fotografía de la película de 2009 de Disney titulada
Disney´s A Christmas Carol, donde podemos ver a Scrooge.
Scrooge está trabajando en su oficina cuando dos hombres vienen en busca de dinero para los desamparados que pueblan las calles en el día de Navidad. La primera respuesta de nuestro protagonista es “¿No hay cárceles?” en gran abundancia, responderá uno de los señores, “¿Y los asilos de la Unión? ¿Ya no funcionan?”, sí, vuelven a responder los señores matizando que los pobres no quieren ni oír hablar de ellos. “Y los molinos penitenciarios y la Ley de Pobres  están vigentes ¿no?” vuelve a inquirir Scrooge. Los señores vuelven a intentar llegar al corazón que parece ni palpitar de Scrooge diciéndole que todas esas instituciones no dan el consuelo necesario para esas almas en pena, y que lo único que intentan es recaudar algunos fondos para comprar alimento a los pobres y medios para que se calienten. Scrooge sigue insistiendo en que no va a dar nada de dinero para que “la Navidad la celebren gentes desocupadas” cuando él ya contribuye al mantenimiento de las instituciones antes mencionadas. Y en un último intento los dos señores dicen “Muchos no pueden ir a ellas; y otros preferirán morirse antes que ir”. La respuesta es rotunda “si prefieren morirse, que lo hagan, así descenderá el exceso de población”.

Tal vez Dickens monumentalizó la avaricia y el sin corazón de su protagonista principal, pero las instituciones sí que existían y los burgueses capitalistas pagaban por ellas en los impuestos. Pagaban por lo Asilos de la Unión (Union Workhouses) que fueron consecuencias de la Poor Law Amendmet Act (Ley de reforma de los pobres) de 1834, que dividía a Inglaterra y Gales en veintiún distritos, en cada uno de los cuales había un comisario con facultades legales para formar “uniones de pobres” mediante la agrupación de parroquias  y construir asilos para indigentes. El término Unión llegó a ser empleado como sinónimo de asilo.
Los molinos penitenciarios son una fórmula melodramática que Dickens utiliza para referirse a los molinos que fueron utilizados, sobre todo en épocas romanas,  como instrumentos carcelarios. La ley de pobres, a la que antes nos referíamos, fue aprobada por el Parlamento en 1834. Su aplicación dio lugar a la creación de verdaderos guetos en los que vivían forzosamente separados entre sí los miembros de las familias pobres. Disraeli afirmó que la Poor Law ultrajaba los sentimientos del pueblo. Y Dickens la atacó ferozmente en varios pasajes de Oliver Twist.
La referencia del exceso de población que hace Scrooge nos muestra una de los planteamientos de Robert Malthus que aparecían en su libro Ensayo sobre el principio de población (Essay on the Principle of Population) donde impuso la creencia de que en Gran Bretaña había un gran exceso de bocas que alimentar, y que por lo tanto, debía restringirse la natalidad a través de dos tipos de estrategias naturales y humanas.

El cuento prosigue con la aparición de varios fantasmas que llevan a Scrooge al pasado donde le muestran como era antes de convertirse en un adicto al trabajo y todo lo que ha perdido por ello. El fantasma de las Navidades presentes que le enseña como todos por muy pobres o ricos que sean celebran la Navidad con alegría e ilusión. Y por último el fantasma de las Navidades futuras, una siniestra figura que no habla, que solo señala los desenlaces trágicos de la vida del avaro viejo.

Como veis no estamos tan lejos de esa realidad que dibujaba Dickens en el XIX, no estamos tan lejos de esa avaricia y corrupción que lleva a los demás a no pensar en nadie, nada más que en su enriquecimiento. No estamos tan lejos de ese capitalismo que arrasa nuestras vidas y muchas veces las destruye. Ni de esos Scrooge a los que no les importamos nada, pero que se sienten muy filantrópicos al pensar que bastante con pagarnos 400 euros para vivir una familia.

Y aunque no lo creamos, no están tan lejos de destruir la clase media y convertirnos a todos en esos proletarios que luchaban literalmente por vivir un día más en su mísera pobreza.


Ana Pinel Benayas

BIBLIOGRAFÍA:

DICKENS CHARLES Canción de Navidad, Villancico en prosa o cuento navideño de espectros, Anaya, 2009.

PDF de José Antonio García Fernández sobre la biografía de 

Dickens. file:///C:/Users/Anna%20Herpbrun/Downloads/BIOGRAF%C3%8DA%20DE%20CHARLES%20DICKENS%20(1).pdf

sábado, 20 de diciembre de 2014

COLABORACIÓN: Algunas muestras para la identificación de restos óseos de pequeños mamíferos en excavaciones arqueológicas.

Como ya sabemos, desde el Neolítico las especies domésticas predominan entre los restos de fauna encontrados en los yacimientos arqueológicos. Cráneos y otros huesos del esqueleto de ejemplares de ganado bovino, ovicaprino y porcino, junto con équidos y cánidos, aparecen con frecuencia en las excavaciones ligados a los restos de los asentamientos humanos. Naturalmente, la caza agrega a esta lista algunas especies silvestres, tales como el ciervo (el gamo, que al parecer se extinguió en Europa en la última glaciación -aunque algunos investigadores plantean su supervivencia en áreas en torno al mediterráneo-, fue reintroducido por los romanos), el jabalí, el conejo y la liebre.

Si bien, la rápida biodegradación de los tejidos óseos, especialmente por la descomposición aeróbica, impide la perdurabilidad de gran parte de los restos más finos e inconsistentes, un análisis meticuloso de los materiales extraídos de cada cuadrícula y estrato del yacimiento, permite detectar pequeñas piezas óseas, minúsculos fragmentos, huella indeleble de la presencia de otros mamíferos de menor tamaño, incluso de micromamíferos, asociados de alguna manera a las arquitecturas de los poblados, a la vida misma de sus moradores, compartiendo un ecosistema, un paisaje más o menos antropizado.

Presentamos aquí algunos cráneos y otros huesos que podrían servirnos para una identificación ulterior de pieza óseas de características similares.

ORDEN LAGOMORFOS

FAMILIA LEPÓRIDOS

Liebre común (Lepus capensis)


Conejo común (Oryctolagus cuniculus)


Obsérvese en la imagen comparativa que el perfil es más bien cóncavo en el caso de la liebre, mientras que en el conejo tiende a ser convexo.




Atlas (primera vértebra cervical) de conejo










ORDEN ROEDORES

FAMILIA GLÍRIDOS

Lirón careto (Eliomys quercinus)





Las fórmulas dentarias resultan imprescindibles para la correcta identificación de las diferentes especies de roedores.

En la imagen, molar de lirón careto.








FAMILIA MÚRIDOS

SUBFAMILIA MURINOS

Pertenecen a esta subfamilia las ratas y ratones (rata negra, rata parda, ratón de campo, ratón casero, ratón leonado, ratón espiguero, ...).


SUBFAMILIA MICROTINOS

Pertenecen a esta subfamilia la rata de agua, el topillo común, topillo de campo, topillo rojo, topillo pirenaico, ...
En la imagen, vista transversal y longitudinal de un molar de microtino.








ORDEN INSECTÍVOROS

FAMILIA SORÍCIDOS

SUBFAMILIA CROCIDURINOS

Musaraña común (Crocidura russula)



ORDEN CARNÍVOROS

FAMILIA MUSTÉLIDOS

Turón común (Putorius putorius)



Finalmente una imagen con restos del esqueleto de un mismo ejemplar de roedor.








BIBLIOGRAFÍA:

RODRÍGUEZ DE LA FUENTE, F. (1978): "Cuadernos de campo". Ed. Marín.    Barcelona.

VV.AA. (2012): "Los últimos carpetanos: el oppidum del El Llano de la Horca". Museo    Arqueológico Regional. Madrid.

Anotaciones de campo y fotografías del autor.


Arturo Asensio Moruno.

Licenciado en Bellas Artes, por la Universidad Complutense de Madrid. Artista plástico,
ilustrador, restaurador de obras de arte y naturalista.

Seleccionado en 1980 en el I Premio Internacional Príncipe de Asturias para Jóvenes Investigadores, por el trabajo de investigación "La Naturaleza en la ciudad".

Ha ilustrado los "Cuadernos de Campo" de Joaquín Araújo en el suplemento Natura de El Mundo.

Ha realizado las ilustraciones para la exposición y catálogo sobre "Los últimos Carpetanos", en el Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid.

Ha realizado las ilustraciones para la exposición permanente de las Salas de Prehistoria del Museo Arqueológico Nacional de Madrid, en su reciente remodelación.






















domingo, 14 de diciembre de 2014

ESPECIAL: 100 años de la Gran Guerra

Con esta entrada conmemoramos el estallido de la Gran Guerra a través de un pequeño resumen de las conferencias impartidas en nuestra facultad en el mes de noviembre. Nos vamos a centrar en varios temas multidisciplinares, que reflejan bien el perfil de nuestro Grado de Humanidades y Patrimonio. Los temas son: La Gran Guerra, España ante la Gran Guerra, El arte de la Gran Guerra, El Vaticano en la Gran Guerra y El cine de la Gran Guerra. 

La Gran Guerra en su contexto histórico: algunas reflexiones a distancia

La Gran Guerra supone el fin de un mundo y el comienzo de otro. Fue una guerra novedosa debido a su duración y la eficacia de los nuevos armamentos. Una Guerra que enfrentará a los siguientes bandos: los aliados: Francia, Rusia y Gran Bretaña más luego Bélgica y Serbia; las potencias centrales, el Imperio Alemán y el Austrohúngaro. Y las potencias neutrales que solo eran seis, Noruega, Suecia, Dinamarca, Holanda, Suiza y España.

La secuencia de la guerra es una guerra de movimientos en el año 14, una guerra de posiciones en los años 15 y 16, guerra de desgaste el 17 y luego la ofensiva y el desenlace final en el año 18.

Impactante imagen que nos muestra las innovaciones
armamentísticas de la Gran Guerra, que rompió radicalmente
con las tradicionales guerras del siglo XIX.
Tenemos que tener en cuenta el debate que se generó en torno a las responsabilidades. El Tratado de Versalles culpa a Alemania. Pierre Renouvin habla de responsabilidad mitigada. Lenin, en su libro Imperialismo. El estado supremo del capitalismo, culpa al propio capitalismo. También tenemos la teoría del determinismo mecanicista donde nadie es culpable y por último la responsabilidad compartida. 

Y como punto y final las consecuencias, 10 millones de muertos, 20 millones de heridos y mutilados. Y así se construye una nueva Europa a través de los tratados de Versalles, cuya población es una población menguada, más envejecida y a la vez más femenina y donde los suicidios, como los divorcios y los problemas mentales marcarán esta sociedad agonizante.

Conferencia impartida por: Elena Maza Zorrilla (UVA)

¿Neutralidades que matan? España en la Gran Guerra

España se declarará neutral, pero a su vez participará en la Guerra como el resto de las potencias enfrentadas y se convertirá en la mayor abastecedora del bando aliado. Mientras tanto su rey, Alfonso XIII, se alzará como pacifista, intentando ofrecer la imagen de una España fuerte, que es capaz de resolver el conflicto a través de las palabras. Pero en realidad fue un pacifismo que encerraba el deseo y la vigilancia de las novedades que se empezaron a desarrollar en las bombas tóxicas. 

Imagen de la famosa espía Mata-Hari.
La mayoría de las actividades económicas de España, serán desarrolladas por otros países, como Inglaterra. Un país que además puebla al nuestro de espías que controlan las mercancías que llegan a Gibraltar y a los principales puertos: Sevilla, Málaga, Barcelona, Vigo y Bilbao. A parte de los minerales, uno de los sectores que se convierte en una gran fuente de exportación es el aceite de oliva, debido al alto contenido de ácidos que será utilizado para los explosivos.

Hay que tener en cuenta que la carta de neutralidad que España jugó en la Gran Guerra no le sirvió de nada, ya que no salimos recompensados, sino más bien amenazados por Inglaterra que intentó arrebatarnos territorios en Marruecos.

Conferencia impartida por: Carolina García Sanz (CSIC-CCHS)

Las vanguardias históricas en la Gran Guerra

En los inicios del siglo XX nacieron las vanguardias, que produjeron una renovación absoluta y sin marcha atrás de lo que era el lenguaje artístico. El término vanguardia, es un término militar. Es lo que va delante, lo que va rompiendo. Movimientos de muy corta duración, de consumo muy rápido y que se especializaron en un punto determinado del arte.

El primer grupo fueron los expresionistas. Estos nacen en la Alemania prebélica. Un arte que renuncia a la belleza en aras de la subjetividad y emotividad. Su característica será la xilografía, una técnica de grabado que crea muchos contrastes y marcará su pintura, con ángulos violentos e imágenes agresivas. Su cabecilla será Ernst Ludwig. En este mismo ámbito de expresionismo, nacerá la abstracción en 1911 con Kandinsky. Y en 1916 muere el movimiento.

Cuadro de la expresionista alemana Käthe Kollwitz
Entre 1909 y 1916 surge otra vanguardia en el norte de Italia, en Milán. El futurismo, que es radicalmente opuesto al expresionismo, ya que es una vanguardia belicista. Su mayor representante es Tommaso Marinetti. En la tardía revolución industrial italiana encontrarán la belleza y la forma de rechazar todo lo clásico. Descubrirán la cronofotografía, que trasladarán a sus creaciones dotándolas de movimiento, como el cuadro Dinamismo de un perro con cadena.

Dinamismo de un perro con cadena, Giacomo Balla, óleo sobre lienzo, 1912.

Y por último Dadá, que se refugia en terreno neutral, Suiza y es el único movimiento que nace y muere con la Guerra.  Dadá rompe con todo el arte hasta ahora creado y se alza en la máxima de que todo debemos dejarlo al azar. Crean los fotomontajes recuperan los collage. Nace con ellos el surrealismo y por supuesto los objetos encontrados o rápidos llamados readymades, donde la imagen es sacada de su contexto y el objeto pierde por lo tanto su función, reduciéndolo a algo absurdo.

Este fue el primer objeto encontrado que se creó. Su autor,
Duchamp, no se atrevió a firmarlo con su propio nombre.
Al lado del urinario aparecía un cartel que decía "Fuente".


Estos movimientos desarticularon el método y la historia, invitaron a lo grotesco y a la provocación. Ya que no hay belleza que no esté ligada a la más repugnante fealdad y viceversa.

Conferencia impartida por: Palma Martínez-Burgos (UCLM)

El Vaticano y la Gran Guerra

Retrato de Benedicto XV. 
Tras la muerte de Pio X, el 31 de agosto, el conclave se reúne para elegir un nuevo Papa, y decide que excluirá a todos los cardenales de los países beligerantes o aquellos que manifiesten unas simpatías demasiado fuertes por un bando u otro. Y así el día 3 de septiembre el cardenal Giacomo della Chiesa se alzará como nuevo Papa. 

Un Papa moderado que no se inclinó ante el integrismo, sino que tenía una actitud equilibrada ante el conflicto bélico. Su objetivo prioritario fue lograr el fin de la Guerra y evitar sus secuelas, con el único medio de su palabra y la influencia que pudiera tener a nivel diplomático.  Y así hay que resaltar la importancia de un Papa que por primera vez en la historia de la Iglesia se mantuvo neutral y sobre todo en contra de esta.  


Conferencia impartida por: J. Carlos Vizuete Mendoza (UCLM)


Cómo contar el horror. La Gran Guerra en el cine

El cine nace en 1895, es una consecuencia y resultado de la revolución industrial y de las innovaciones técnicas y científicas que se habían ido produciendo en el siglo XIX. El cine fue usado como un arma de guerra, a través de la reconstrucción de imágenes y la exaltación del patriotismo.

El cine durante los primeros años de guerra fue un cine patriótico, donde destacaré la película Juana de Arco. En esta película que cuenta la historia de Juana de Arco se añade un epílogo ambientado en la Gran Guerra, donde un héroe francés muere tras una misión de volar una trinchera enemiga, y entonces aparece Juana de Arco representando a los franceses que mueren por la patria.

Escena final de la película Juana de Arco.

Una segunda etapa del cine, fue el periodo de entreguerras que humaniza la guerra o a sus personajes, y a partir de 1930 cuando empieza a hacerse inminente el peligro de una nueva guerra, un cine pacifista que trata de evitarla. Donde destacaré la película La gran ilusión (Jean Renoir, 1937) fue una gran película pacifista ya que rompe con todos los esquemas. La gran ilusión, aunque esto es muy discutible, podría haber evitado la guerra, el haber neutralizado los enfrentamientos nacionales horizontales con un enfrentamiento vertical. Y sin embargo ocurrió todo lo contrario. La película muestra desde un punto de vista humanista como hay menores diferencias entre los proletariados de dos naciones enfrentadas, que entre las clases sociales de una misma nación.



Con la Segunda Guerra Mundial la Gran Guerra quedará enterrada. Hasta que la Gran Guerra se redescubra a finales de los años 50, esta vez sobre el marco de las guerras coloniales que estaba teniendo lugar en esos años y que tienen como una de sus últimas manifestaciones la guerra de Vietnam. Estas películas ya no son solamente pacifistas sino incluso antimilitaristas, son mucho más críticas y lo que hacen es cuestionar la guerra en sí misma. Aquí resaltaré la película Johnny cogió su fusil donde se nos cuenta las consecuencias de la guerra, aquellos que tuvieron que convivir con un cuerpo destrozado para el resto de sus días.


Y el último periodo los años finales del XX y los primeros del XXI donde no vemos todavía una tendencia clara en ellas. Destacaré la película de Spielberg War horse. Una película que tiene algunos momentos muy significativos. Como la similitud que hace, ante la sustitución del caballo por el caballo metálico, que serán los tanques, en una de las escenas donde los dos se encuentran frente a frente. 


Conferencia impartida por: Fernando Martínez Gil (UCLM)

Cerraremos el artículo con un gran anuncio inglés que conmemora el estallido de la Gran Guerra. 

El anuncio ilustra un hecho histórico poco conocido, la Navidad de 1914 no fue una Navidad como nosotros la conocemos, ya que muchos de los soldados la pasaron dentro de las trincheras. Un gran homenaje a todos esos hombres que lucharon, se podría decir, casi por nada. Hoy los recordamos a todos, porque ellos fueron realmente los que más sufrieron las consecuencias de la Guerra. 



Ana Pinel Benayas.